sábado, agosto 02, 2008

Balón o jugador

Como dice mi compi de trabajo Berto: "El deporte es malo para la salud, ¿por qué sino duele después de hacerlo?" Está claro, el cuerpo nos avisa de cuando hay algún problema, ya sea expresándolo a través de dolor, temperatura, inflamación... Si duele, implica que algo no va bien.

Hace unas pocas semanas me crucé con un antiguo compañero del Vioño C.F., el equipo de fútbol de 3ª regional donde jugué 2 temporadas después de la universidad. Sin demasiados problemas, me convenció para volver con otras viejas no-glorias y esta misma semana he empezado la pretemporada, a los casi 30...

Claro, los años no pasan en balde, y tras la semana más deportiva de mi vida post cuarto de siglo, con 2 sesiones de gimnasio lunes-jueves y 2 de fútbol pretemporada en playa miércoles-viernes, el sábado me he levantado con los gemelos y la espalda quejándose del sobreesfuerzo, obligándome a caminar como un abuelito de 80: cojeando y con una mano sujetando las lumbares.

En fin, Berto tiene razón, el deporte no es saludable, sobre todo a cierta edad. No en balde soy el mayor del equipo, además del de mayor fama de leñero, leñador o "javi navarro", como queráis llamarlo.

Lateral derecho sin velocidad y con poco fondo físico se ofrece para agarrar, empujar y meter la pierna a extremos correosos, idealmente bajitos y de menos de 70 kilos, en liga regional sin linieres y árbitros aficionados medio choscos. Razón, campo de Agrela, preguntar por "Portu", el vigués-coruñés de vuelta en el Vioño.

Ay, qué pena me dan los Ronaldos del mundo. Los años pasan, pero lo básico no cambia: balón o jugador, pasa uno o el otro, pero nunca juntos.