lunes, noviembre 13, 2006
Triste adiós a la protección 24 horas
En mi último paseo, en esta ocasión a Lille (Francia) a visitar a una amiga que no veía desde el año pasado en San Diego, me he topado con la nueva moda de la Unión Europea (UE): las bolsitas de plástico! [flickr.com]
¿Todavía no tenéis una? No sabéis lo que os estáis perdiendo, están arrasando en los aeropuertos de toda la UE. Son transparentes, de un litro de capacidad, con cierre hermético... Es decir, fullequip, tienen de todo. Olvídese usted del ipod nano, la PSP Portátil y demás gadgets electrónicos, el "rompe y rasga" actual es mucho más elegante, simple y minimalista.
En el mundo en el que vivimos, basta que algo se ponga de moda para que todo el mundo lo copie. Han salido el lunes pasado y el miércoles ya había un montón de imitadores con fakes de lo más burdo: bolsas mucho más grandes, con asas, colorines, letras publicitando supermercados y tiendas de todo tipo y condición...
Qué vergüenza! Si fueran CDs de pseudo música de algún famosete, estaría la SGAE en todos los medios pidiendo cabezas, pero como eran copias (ilegales) de meras bolsas de plástico, nada, la injusticia quedará impune. Por suerte, todavía no se pueden descargar por internet, pero ¿quién compensará al creador de tan magna obra de la ingeniería moderna?
Más aún, ¿qué haríamos los pobres europeos si no existiesen? Sin ellas, nuestras vidas correrían un peligro cuasi infinito, sólo imaginable en las mentes de los pensadores del más alto nivel, aquellos llamados a gobernar nuestros destinos desde la nunca suficientemente bien considerada sede del Parlamento Europeo [flicker.com].
Ah!, es que todavía no lo he explicado? La moda más in, el minimalismo convertido en arte moderno, no ha sido introducida por ninguna vanguardia creativa, sino por nuestros líderes europeos, los heroícos ministros de interior de la UE. Gracias a ellos, los terroristas no podrán esconder sus poderosos explosivos en los botes de pasta de dientes o, al menos, no más de 100 mililitros de explosivos. Nos han salvado la vida!
George Orwell [bibliopolis.com] está de enhorabuena (una vez más) y los productores de botes de gomina de más de 100 ml de absoluta capa caída. Nunca llueve a gusto de todos! Conste, que a modo de protesta y como apoyo de cliente VIP que soy, me llevé en mi bolsita de plástico individual un bote de gomina de... ¡150 mililitros!. Soy un reaccionario, un revolucionario de la new age, el Ché Guevara estaría orgullo de mi conducta contestaria, aunque pacífica.
Con todo, como en toda revolución, por pacífica y cívica que esta sea, siempre hay bajas inesperadas. La bolsa de plástico, a la que nunca haremos suficiente homenaje con este modesto post, no alcanzó para salvaguardar la integridad de mi bote de pasta de dientes. Si bien en España pude saltarme los controles para subirlo al avión en un acto de valentía sin límites, en Francia no fue posible hacerlo y tuve que dejarlo atrás.
No puedo sino entonar un cántico de triste adiós a la protección 24 horas de mi bote de Colgate Total.
Europa está a salvo de los terroristas, pero ¿qué hay de mis caries? Empiezo a pensar que el intento de atentado de Londres fue un complot de las asociaciones de odontólogos europeos...
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