Unos ganan, otros pierden, España a la final

Quién va a meter el primer triple del partido? Cómo será la primera del 2º cuarto? Por cuánto ganará España? Qué porcentaje de tiros libres anotará Grecia? Meterá Garbajosa 2 o más triples?...

Los cabrones de los griegos no sólo nos han hecho sudar hasta el final y semi perder la voz, también se han empeñado en meter el primer triple del partido, tirar más de un 69,5% de libres y no dejarnos ganar por entre 11 y 25, los tramos que cubrían nuestras apuestas.

Javichan y yo hemos visto el partido de pie en continúa tensión, desesperados por los 0 de 4 triples de Garbajosa, la deficiente defensa zonal española y las extrañas decisiones del árbitro ukraniano (¿técnica a Rudy, falta en ataque de Garbo?).

Vaya partido! Quién nos iba a decir que después de las últimas 2 palizas en la final del mundial y la semana pasada, los griegos iban a jugar así de bien, fieles a su estilo clásico de defensa pegajosa al límite del reglamento.

Los golden boys han ganado el partido sin apenas rotaciones, con claro protagonismo de Pau Gasol, Calderón y, sobre todo, un Navarro definitorio en los momentos claves. Ni Berni ni Sergio han jugado, y Mumbrú y Marc Gasol no han llegado a los 5 minutos.

Con todo, la clave han sido los tiros libres anotados por España, porque los griegos han tirado 66 tiros de 2 y 3, por 43 (21 de 2, 22 de 3) de España. Gracias a los 27 de 28 de la línea de personal, 8 seguidos en el último minuto y pico, la selección ha ganado una semifinal que permite seguir soñando con el oro...

Mañana veremos la final a las 21:30, espero que contra Rusia, sobre todo por no seguir perdiendo apuestas. Hasta el momento, con 1 acertada sobre 10, hemos conseguido exactamente lo contrario que España, perderlo casi todo. Desde hace un rato noto más ligero mi bolsillo...

Eso sí, lo mejor de todo es que mañana no tendremos que ver a la rubia (y guapa) aficionada griega todo el rato en la pantalla, durante cada pequeña pausa no cubierta por publicidad. Qué sí, está muy buena y todas esas cosas. Qué sí, ya sé que a mí me gustan las rubias... Pero cada cosa en su sitio, baloncesto por un lado y rubias por otro.

Ya me lo decía mi madre: "Javi, no mezcles".